La Agenda 2030 plantea retos para la producción agrícola en base a la sostenibilidad de los cultivos y del medio de producción, objetivos que se encuentran alineados con valores que actualmente demanda la sociedad.
Los suelos son un recurso esencial que hay que conservar para mantener tanto la capacidad productiva como la calidad de los alimentos que se producen.
Así, la
Agricultura Regenerativa se define como un sistema de producción cuyo propósito es mantener e incrementar la fertilidad de los suelos, buscando un nuevo equilibrio en el ecosistema suelo-cultivo.
¿Qué aspectos se valoran en esta certificación?
La importancia de mantener e incrementar el contenido de materia orgánica, así como el desarrollo del microbioma nativo de los suelos (microorganismos).
El Modelo Epigen Healthy Bite®
Tras años de estudio buscando alternativas de manejo a los sistemas de cultivo tradicionales, se ha desarrollado una metodología con resultados contrastados.
Contempla la aplicación de una serie de buenas prácticas y técnicas de cultivo que, de forma coordinada, van a permitir lograr un nuevo
equilibrio entre el suelo y la planta.
Entre las técnicas de cultivo se incluyen el laboreo mínimo y una adecuada gestión de malas hierbas, eficiencia en el uso de agua de riego, planificación de siembras y cultivos, rotaciones, fomento de la biodiversidad en el entorno de producción, uso de maquinaria, nutrición vegetal y gestión de plagas y enfermedades.
Durante las auditorías se evalúa el cumplimiento del conjunto de buenas prácticas, así como de indicadores que sirven de base para monitorizar el grado de regeneración de los suelos.
Es una certificación orientada a productores.
Ventajas de la certificación:
- Mejorar la salud de los suelos,
- Mejora la estructura del suelo y su capacidad de retención de agua,
- Reducción la dependencia de los cultivos de insumos químicos,
- Aumento del contenido de carbono en el suelo.